Los sistemas biométricos utilizan características personales (directamente vinculadas al usuario) para autenticar o identificar a una persona. Un sistema recopila características biométricas únicas de cada persona. A continuación, estas características biométricas se vinculan directamente para verificar o identificar al individuo.
Las características biométricas se procesan a través de un sistema biométrico, que puede comparar eficazmente el rostro, el iris, la huella dactilar, etc. para verificar o identificar a una persona. A medida que la biometría va en aumento, los sistemas biométricos se están integrando en las áreas más comunes de la vida cotidiana. El más eficiente es el Sistema Automatizado de Identificación Biométrica – ABIS.
Un sistema biométrico trabaja con los datos biométricos obtenidos de una persona, a partir de los cuales un algoritmo especial selecciona características para crear una plantilla biométrica. A continuación, el sistema coteja la identidad de la persona con la base de datos biométrica. Puede hacerlo en un segundo, mientras compara cientos de millones de datos biométricos en la base de datos.
Podemos medir el rendimiento de un sistema biométrico a partir de tres características principales. Estas son: Tasa de falsos rechazos (FRR), Tasa de falsas aceptaciones (FAR) y Tasa de errores iguales (ERR).
La Tasa de falsos rechazos representa la probabilidad de errores de detección por parte de un sistema biométrico, lo que significa que no puede reconocer a un usuario cuyas características biométricas ya están en la base de datos. En caso de rechazo, la persona debe verificar su identidad de nuevo. Desde una perspectiva de seguridad y protección, esta tasa no significa que sea necesariamente un resultado negativo.
La tasa de falsas aceptaciones es la probabilidad de que un sistema falle y coincida con las características biométricas de una persona con una plantilla incorrecta, y le dé permiso para acceder. Esto puede suponer una amenaza potencial, ya que el sistema otorga permiso a una persona no autorizada para acceder a una cuenta, instalación, etc.
La tasa de errores iguales es un indicador esencial según el cual un sistema acepta o rechaza entradas biométricas. Esta tasa es el valor de igualdad entre FRR y FAR y representa el número ideal de errores de los dos.
Cada método biométrico, ya sea rostro, huella dactilar, huella palmar, iris, etc., tiene diferentes valores para diferentes tasas en función de las cuales un sistema rechaza o acepta las entradas.
Aunque se la considera mayoritariamente una tecnología moderna, la biometría se ha utilizado prácticamente desde el siglo XIX. Uno de los primeros campos de aplicación fue en los departamentos policiales y criminológicos. La recopilación de medidas de características únicas de los seres humanos resultó un éxito. Sin embargo, el proceso de emparejar y cotejar manualmente patrones biométricos era difícil de realizar de manera efectiva y consumía demasiado tiempo. Además, la posibilidad del error humano también influye.
Hoy en día, un sistema complejo con tecnología moderna se basa en la inteligencia artificial y las redes neuronales. Gracias a los algoritmos de alto rendimiento, premiados por el NIST, se puede realizar un reconocimiento facial exitoso, incluso a partir de imágenes borrosas o de baja calidad. Esto aporta ventajas al sistema biométrico, que puede funcionar excepcionalmente rápido, incluso cuando se compara una entrada biométrica en una base de datos grande.
La tecnología biométrica está creciendo rápidamente, ya sea en los ámbitos gubernamental, policial o empresarial. La comodidad de un sistema biométrico aporta beneficios a millones de personas y, al mismo tiempo, hace que diversos procesos sean mucho más fáciles y accesibles. Las principales ventajas de implementar sistemas biométricos son la eficiencia en el tiempo, la fiabilidad y la precisión de los resultados. Por ejemplo, el sistema de gestión de identidad biométrica de Innovatrics está diseñado para satisfacer las necesidades de cualquier proyecto, incluso con requisitos mínimos de hardware.
Un sistema biométrico puede ser excepcionalmente útil en aplicaciones que requieren una identificación biométrica precisa basada en rostros obtenidos de imágenes, huellas dactilares latentes o huellas palmares. Nuestro sistema de gestión de casos penales con el módulo de investigación puede procesar una gran cantidad de rostros, incluso desde un vídeo en directo. El rendimiento del reconocimiento facial de nuestro módulo de sistema biométrico fue premiado por el NIST FRVT por generar excelentes resultados en múltiples categorías.
El módulo de investigación de un sistema biométrico también permite agrupar y clasificar huellas dactilares en casos penales para ayudar a organizar la evidencia de los rostros capturados y las huellas dactilares y palmares obtenidas. Esta característica ayuda a los investigadores a conectar la información recopilada entre casos no resueltos y buscar una coincidencia en la base de datos biométrica.
El autorregistro o el registro asistido mediante una identificación y una fotografía de retrato o una «selfie» es una forma sencilla, paso a paso, de inscribir a solicitantes o clientes. Un sistema biométrico proporciona un registro fiable a través de funciones como el reconocimiento óptico de caracteres (OCR), verificación de duplicados, coincidencia de rostros, estimación de la edad y el género, detección de vida, autenticidad y vigencia del documento, y singularidad del solicitante. Todos los datos de registro recopilados se almacenan en un registro biométrico central para acceder a toda la información o evitar posibles riesgos de seguridad. La inscripción biométrica se puede hacer utilizando una aplicación web, una aplicación para teléfono móvil o una estación móvil específica cuando se necesita ayuda.